Durante una investigación realizada en España, a niños de tres años se les sustituyeron los útiles escolares tradicionales por elementos tecnológicos de última generación.
Un estudio realizado en España para medir el impacto real de las nuevas tecnologías en niños de tres años, demostró que el 84% de los alumnos que utilizaron un Tablet PC en matemáticas, incrementaron en cinco puntos sus calificaciones.
La investigación -primera en Europa y llamada Máctic-, fue realizada por El Parque de Innovación La Salle, Toshiba España y el parvulario de La Salle Bonanova.
El estudio se realizó en 52 niños de 3 años, a quienes se les cambiaron los útiles escolares típicos, cuadernos, lápices, libros y pizarras por una Tablet PC inalámbrica de Toshiba cargada con un software educativo, un proyector y una pizarra digital.
Xavier Pascual, presidente de Toshiba España y vicepresidente para el Sur de Europa explicó a Arbol de Noticias que “la educación es el principal motor para el desarrollo de la sociedad y la introducción de la tecnología puede mejorar la calidad de la misma así como incentivar el aprendizaje. Por ello iniciar a los niños de 3 años, que todavía no saben leer ni escribir, en el uso de las tecnologías puede acelerar su capacidad para aprender, como queda demostrado en los resultados del estudio”.
RESULTADOS
Comparados con una clase tradicional, el 84,6% de los niños del estudio obtuvieron calificaciones notables, es decir igual o mayor a 7 en una escala que llega hasta el 10, mientras que los primeros llegaron a 57,7%.
Los niños que utilizaron la Tablet PC realizaron cuatro veces más ejercicios que los que no la utilizaron, y los profesores disminuyeron a la mitad el tiempo de explicación y corrección.
Los alumnos, tanto de la clase tradicional como la del estudio, fueron evaluados en matemáticas al inicio y al final del proyecto Mátic. Los niños del proyecto aumentaron la media de 3,4 a 8,5, mientras que los del curso tradicional lo hicieron de 4,7 a 6,9.
Además, manifestaron una actitud más positiva y motivación incrementada a través de un comportamiento autónomo, atrevido y curioso hacia un mundo por explorar, escasa pérdida de atención y mejora en las capacidades de motivación, deducción, concentración, memoria, agilidad, habilidades psicomotoras y adquisición de buenos hábitos de trabajo y aumento de la coordinación óculo-manual (ojo-mano).
Según la directora del jardín infantil La Salle Bonanova, Mercè Parcerisas, “los alumnos han demostrado una actitud más entregada a las actividades escolares, y han trabajado más motivados y atentos gracias a los factores que hacen de las herramientas tecnológicas un concepto más atractivo e innovador”.
Fuente: La Tercera.
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