Felipe Calderón afronta actualmente una guerra en dos frentes: el económico, para tratar de reducir los efectos en México de la recesión de Estados Unidos y la batalla contra los cárteles del narcotráfico. En ambas guerras la colaboración y coordinación con el gobierno de Obama será decisiva. En la lucha contra los cárteles Felipe Calderón y Obama se han comprometido a mantener el Plan Mérida. La Cámara de Representantes de Estados Unidos aprobó el miércoles un proyecto de ley presupuestario para 2009 que incluye el desembolso de 405 millones de dólares para la Iniciativa Mérida para combatir el narcotráfico y el crimen organizado en México y Centroamérica.
La ofensiva contra los cárteles
Pero la colaboración entre México y Estados Unidos se evidenció esta semana en otros hechos: el presunto narcotraficante Miguel Caro Quintero fue entregado en extradición al de Estados Unidos y ya son 203 personas extraditadas en lo que va de gobierno Calderón, 195 a EE.UU.
Mientras, agentes federales anunciaron la detención de 755 sospechosos en una redada contra cárteles mexicanos en Estados Unidos. La DEA informó en un comunicado que 52 de los arrestos tuvieron lugar el miércoles en California, Maryland y Minnesota.
Calderón se ha comprometido nuevamente a luchar contra el crimen organizado hasta derrotarlo: "Les puedo asegurar que no descansaremos hasta ver a México como un México seguro, libre de la acción de la criminalidad, en especial del crimen organizado, nos tome el tiempo que nos tenga que tomar, lo vamos a lograr si estamos unidos los mexicanos".
El secretario de Gobernación, Fernando Gómez Mont, aseguró que los tres niveles de gobierno se comprometieron a expulsar de la ciudad de Juárez a los criminales y a no cederles "ni un centímetro". "La decisión de enfrentar a la violencia será visible por los habitantes de la zona en las próximas semanas".
La Operación Conjunta Chihuahua comenzó en marzo de 2008 con el despliegue de 2.500 soldados. Desde entonces se han producido más de 2 mil ejecuciones. En 2009 ya van más de 400. Ahora se espera que el número de efectivos militares alcance los 7 mil 500.
La lucha contra la recesión
Pero Felipe Calderón debe atender otro frente, el de la crisis económica en Estados Unidos, recesión que ya se empieza a notar en México. Calderón ya ha lanzado un plan de reactivación y no hay día en el que no apele al optimismo para derrotar a la crisis: "queremos que la acción del gobierno mexicano no sea parte del problema, sino parte de la solución, y en eso estamos concentrados".
La tasa de desempleo en México subió hasta el 5% en enero, su mayor nivel en más de 12 años mientras la economía está en la antesala de una recesión. La economía mexicana se contrajo un 1.6 por ciento en el cuarto trimestre del 2008, su primer tropiezo para un trimestre en cinco años, y los analistas esperan que la recesión se prolongue hasta el segundo trimestre de este año.
El número de desempleados en el país creció en 300 mil en sólo un mes para llegar a 2 millones 250 mil personas. El número de personas sin trabajo pasó de 1 millón 922 mil personas en diciembre de 2008 a 2 millones 250 mil al finalizar enero.
La última llamada al optimismo ocurrió ayer cuando aseguró que "No quiero llamarlo una palabra mágica, porque no es un asunto de magia, es un asunto de decisiones económicas racionales, pero la inversión es la palabra clave para el crecimiento. Si hubiéramos que optar por un solo elemento para que la economía mexicana crezca y genere empleos, es esa: promover la inversión, promover la inversión pública y promover la inversión privada".
Fuente: Información y Análisis America Latina.
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